¿Cómo surge el Administrador de Consorcios?

6 de Diciembre del 2022

“En su sistema de propiedad inmueble, la Argentina tuvo una tardía evolución: recién en 1947 aparece la Ley de Propiedad Horizontal”, comienza la charla Eduardo Lazzari, dando un contexto del surgimiento “oficial” del Administrador de Consorcio, una figura que comenzó desarrollando sus tareas ¡unos cien años antes!

“El progreso económico del país a partir de 1850 se fue dando de manera tal que la aristocracia tuvo un castillo a la inglesa en el campo, un palacio a la francesa en la ciudad, y un mausoleo a la italiana en el cementerio. En el campo había un administrador, una figura sumamente importante, que fue replicándose en otros espacios”, grafica el historiador de Buenos Aires.

¿Cuál es el antecedente de los consorcios de propietarios? Los edificios de renta, algo que en Buenos Aires fue muy importante. “El que poseía el terreno era dueño de todo. Cuando se produce la división en propiedad horizontal, la existencia de servicios comunes -que antes estaban en manos del mayordomo, del personal de cocina y de limpieza, entre otros- dio origen a la necesidad de adecuar los intereses de los distintos propietarios, a partir de alguien que generara ese oficio de administración en común”, cuenta el presidente de la Junta de Estudios Históricos del Buen Ayre (JEHBA).

Tanto las estancias como los palacios tenían un ambiente que era el eje de control del buen funcionamiento del lugar: el escritorio. Desde allí, el administrador -que en algunos casos se llamaba intendente- se ocupaba de que todos los servicios que se brindaban en la casa se dieran correctamente”, rememora Eduardo.  

“Es interesante ver cómo hay figuras que la Argentina sigue sosteniendo más allá de su decadencia económica. El encargado de edificio -por poner un caso-, antiguamente llamado portero, o mismo el Administrador de Consorcio, que fue rediseñando su rol a partir de los distintos cambios que fueron dándose en la manera de vivir actual. Una extensa tradición que se ha ido reconfigurando con el tiempo”, recorre Lazzari.

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Yo opino…

“Me parece importante destacar la idea de que el administrador de consorcios actúa como una suerte de regulador de relaciones entre gente que tiene intereses diferentes, algo así como una figura paternal que no es lo suficientemente reconocida. Es decir, no se agradece esa tarea de conciliación, que verdaderamente ocupa un lugar importante en lo que es la concordia social. No hay que pasarlo de largo sino tenerlo bien en cuenta”, sostiene Lazzari.

 

El Historiador de Buenos Aires

En su página web, www.eduardolazzari.com.ar, pueden indagar sobre la trayectoria de Eduardo Lazzari, quien desarrolla distintas actividades orientadas a la divulgación y preservación del patrimonio histórico y cultural, en especial de la Ciudad de Buenos Aires. En este link, la agenda completa de diciembre. ¡No se lo pierdan!