Administración
27 de Diciembre del 2021
La tecnología se desarrolla rápidamente, y la virtualidad de la pandemia obligó a que esos cambios se aceleraran aún más. Con la diversidad de recursos y herramientas tecnológicas accesibles para todos, hoy la administración debe ser cada vez más proactiva y adelantarse a las necesidades de sus clientes. Por ejemplo, cualquier consorcista puede exigir gestionar soluciones desde su teléfono móvil, acceder a los datos del edificio, efectuar reclamos online y hasta enviar dinero al instante.
Según un informe de la empresa valenciana Megafincas, para 2025 el 60% de la comunicación será a través de la omnicanalidad digital: whastapp, email y la autogestión en la web. La comunicación mediante cartas por correo representará solo el 1% de los canales, mientras que las reuniones presenciales no llegarán al 10%.
Puertas adentro de las administraciones, el impacto de la tecnología se reflejará en que habrá cada vez menos personal abocado a labores administrativas, pero muchos más recursos orientados al relacionamiento con clientes, donde los seres humanos marcamos la diferencia. El contacto con las personas, la empatía y la creatividad para ofrecer soluciones a problemas reales… por ahí pasa el verdadero desafío. Distinguirse para no extinguirse, esa es la cuestión.
Para profundizar sobre las posibilidades que brinda la tecnología para potenciar tu administración, reviví el taller “Distinguirse para no extinguirse”.